Llevan 18 años esperando la Luz

No tengo el placer de conocer al señor Juan Ramón Pineda, quien reside en la comunidad de La Caya, en Laguna Salada, un municipio del Noroeste, pero admiro en él su tenacidad ciudadana.

Hace poco más de tres años, desde la fundación de este diario, Pineda está enviando cartas para la sección correspondiente, solicitando a las autoridades que le lleven a su comunidad el servicio de energía eléctrica.

Pineda tiene insistencia de gotera y no se cansa, aunque no lo escuchen. La última de sus decenas de comunicaciones fue publicada ayer por este diario, en la que revela que los ciudadanos de La Caya-incluyéndose él -llevan 18 años solicitando a todos los gobiernos de turno ese vital servicio.

Pineda revela en su carta que, durante el pasado Gobierno, el 11 de junio de 1982, la Corporación Dominicana de Electricidad, hizo el estudio para la extensión de sus redes de energía hasta La Caya.

En ese entonces, el costo de esos trabajos era de 65 mil 786 pesos con 25 centavos, pero para desgracia de aquella comunidad, ese estudio se archivó y no se le puso la luz.

Hace cerca de un año, esta columna trató el el tema de la luz que necesita La Caya. Y dijo que si el actual administrador de la CDE, ingeniero Marcelo Jorge, complacía esa solicitud, nosotros nos encargaríamos -junto a Juan Ramón Pineda- de promoverle un homenaje el mismo día en que la primera bombilla se prendiera en La Caya.

Aquella columna , como todas las cartas de Pineda, no obtuvieron la más mínima respuesta de parte de la CDE. Y eso es una lástima, pues un pueblo que durante 18 años, en forma pacífica y comedida, esté pidiendo un servicio tan vital como éste, bien merece ser complacido.

Aunque sea para que el señor Pineda no se vaya a morir -Dios no lo quiera- sin ver iluminadas las calles de su comunidad.

NOTA. Este artículo fue publicado el 31 de octubre de 1985, por el periodista colombiano Augusto Obando, en su columna POR QUÉ?. periódico HOY, R.D.

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